Son muchas las ganas que teníamos de hacer una rutita de dos, para dedicarnos tiempo a nosotros mismos y disfrutar de uno de nuestros mayores placeres: la comida y el vino.
Para ello fijamos como destino el Hotel Bodegas Arzuaga, ubicado en Quintanilla de Onésimo, cerca de Peñafiel. El hotel cuenta con un SPA y actividades de relax que son una auténtica delicia. Además de ello, cuenta con el servicio que aporta un Hotel de 5*, que aunque las instalaciones no lo justifican (posiblemente un 4* sería más apropiado), el entorno, comida, y en su conjunto, hacen que la experiencia merezca completamente la pena.
RESTAURANTE
Disfrutamos de unas veladas de comida/cena/desayuno magníficas. Materia prima de primera calidad y maridados con unos vinos excelentes. Nos gustó!
El restaurante, llamado "El Taller", cuenta con un menú que puede resultar algo caro. Nosotros optamos por raciones a compartir y acertamos completamente.
SPA
Sin duda, lo mejor del hotel. Cuenta con un circuito termal muy completo donde el tiempo pasa demasiado deprisa. Dispones de unos horarios para asegurar que no hay aglomeración y dentro encuentras un entorno perfecto para pasar una velada de relax con la compañía que elijas.
BODEGA
Nuestra experiencia también incluía visita a la bodega. Aunque no es de las más bellas, sí que es muy puntera en cuento a técnicas y producción. Arzuaga es toda una referencia y lo percibes en la visita. Hay otras bodegas mejores y otras visitas que nos han gustado más, pero para completar el pack, no está mal.
¡Una excursión perfecta para pasar un día y medio cerca de Madrid!
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